Jean-Charles Olvera
Opinión y Toros
En cada feria de Céret-de-Toros, la Asociación De Aficionados Ceretanos (ADAC) distribuye a la afición una libreta de explicación para seguir la Feria con datos de toros, toreros y diversas notas. Este año, la ADAC comentó a su manera la prohibición de dar toros en Catalunya con visto bueno del Parlament, dando su propia visión de los toros y Catalunya en un artículo titulado “Sem catalans i aficionats”. No resisto en presentarles el texto escrito en catalán y francés, que les propongo en castellano a continuación.
“Desde siglos, en nuestro Vallespir como en gran parte de los Países Catalanes, el toro fue y es aun el elemento clave de las fiestas y acontecimientos populares. La celebración regular de corridas, correbous y de festejos con toros fue averiguada, claro está, en Barcelona, pero también en Cardona (desde el siglo XV), en Céret, Figueras, Olot y en muchos otros lugares. Y que lo queramos o no, la corrida a pie actual es ni más ni menos que la evolución de esas celebraciones con participación de vacas y toros.
El 28 de julio del 2010, el Parlament de Catalunya prohibió las corridas de toros en Catalunya Sur, negando toda tradición taurina en estas tierras. Es una aberración cuando se sabe que Barcelona fue, durante muchos años, una de las ciudades más importantes del mundo taurino, consiguiendo mantener al mismo tiempo y con éxito, tres plazas con festejos taurinos semanales. Y por favor, que no vengan hablando de defensa de la condición animal, ya que se sabe que es secundario.
Los que prohibieron los toros son todos ellos que negaban al pueblo de Catalunya de seguir la selección española de futbol, y que los días siguientes iban al Camp Nou con las banderas catalanas para apoyar su equipo el Barça, donde juegan 9 futbolistas de la Roja.
Aquellos que prohibieron los toros son los mismos que los que intentan prohibir o disminuir a lo más mínimo el uso del castellano en la calle o en la escuela, sin explicaciones ni compromisos.
Estos métodos son curiosamente similares a los que han sido combatidos durante la dictadura de Franco o durante el periodo jacobino en Francia, cuando los maestros de escuela pegaban las manos de los niños de Catalunya Norte, cuando algunos se atrevían hablar catalán, su idioma materno.
Para nosotros, la verdadera cultura catalana no es la que se estanca pero aquella que se abre al mundo, preservando y valorizando su lengua, sus costumbre y tradiciones.
Añadir que para explicar las razones de la caída de Barcelona, conviene no olvidar la política (otra vez) desastrosa de gestión taurina de la Monumental, con la programación de festejos sin interés, donde el mono encaste es legión y religión. ¿Desde cuando no se han vistos toros de verdad en Barcelona?
Al mismo momento que en Francia se reconoció la corrida como Patrimonio Cultural Inmaterial, la corrida en Céret, con sus banderas catalanas, su himno “Els Segadors” antes del paseo, con la “Santa Espina” popular sardana al 5° toro, con los areneros vestidos con fajas y barretinas catalanas, y sobre todo con los Toros como religión, la corrida en Céret es parte integrante, sin ninguna duda, del Patrimonio Cultural Material Catalán (Patrimoni Cultural Material Catalá).”